Como un homenaje a la herencia cultural de nuestros pueblos, el gobernador Omar Fayad, asistió a la celebración de este año del Xantolo en la huasteca hidalguense, una de las celebraciones más emblemáticas de Hidalgo.
En medio de un ambiente festivo característico de la fiesta de ‘Todos Santos’, el gobernador recorrió vistosos altares tanto en el municipio de San Felipe Orizatlán como en Huejutla, donde se dijo estar orgulloso de ser parte de un estado donde las tradiciones se viven en familia.
Al arribar a Huejutla, el mandatario recorrió los altares que para tal efecto, se instalaron en la plaza principal, en donde habitantes de la región, colocaron chozas que escenifican los hogares de las personas, quienes en estas fechas recuerdan a sus antepasados.
En el corazón de la Huasteca, Omar Fayad aseguró que “cuando nos vayamos, nuestros seres queridos nos van a recordar con altares con olor a cempasúchil”.
De acuerdo con las tradiciones de esta zona de la entidad, las familias que ponen sus altares, colocan un arco compuesto se otates (caña de azúcar), que se sujeta a una mesa, mismo que se cubre con palmilla, ramilletes de flor de cempasúchil y mano de león.
A la mitad de esta arco se cuelga fruta, pan de muerto con forma humana, y canastas llenas dé cacahuates y dulces; los manteles están bordados, y al centro regularmente se coloca la imagen de algún santo, fotografías del ser querido, agua y en si caso, la bebida de su preferencia en vida.
El gobernador también visualizó el baile típico de estas celebraciones, cuyos bailarines son conocidos como “colos”, los cuales en su mayoría son hombres quienes se personifican de mujeres para intentar “burlar” a la muerte.
De esta manera, el titular del Ejecutivo hidalguense, promueve e impulsa las tradiciones que dan identidad a su población.