El cambio en la coordinación del grupo legislativo del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), que habíamos adelantado en esta columna hace dos semanas, sólo confirma que los puentes tendidos entre los equipos del presidente electo Andrés Manuel López Obrador y el gobernador del estado Omar Fayad han permitido encontrar una ruta de negociación a la crisis parlamentaria que inicio hace casi un mes y que significaría ajustes a la presidencia de la junta de gobierno y dejaría fuera por ahora, de la mesa de las decisiones al grupúsculo universidad de Gerardo Sosa.
La llegada de Ricardo Baptista, un político formado históricamente en la izquierda y cuyo origen en Morena está directamente ligado con el tabasqueño, fue una señal clara de la disposición y congruencia con el discurso de reconciliación del líder moral del partido que hoy goza de la mayoría en el país.
Pero también esta sería la segunda ocasión que los operadores de Morena y hombres cercanos al presidente electo, atajan las intenciones de Gerardo Sosa por enfrentar al gobierno estatal, la primera ocurrió al frenar la participación de universitarios en la marcha a la que se había convocado para sumarse al reclamo de los hechos violentos ocurridos en la cámara de diputados en agosto, y ahora con el desplazamiento de Humberto Veras de la coordinación parlamentaria que mantuvo siempre cancelada la posibilidad a la negociación política y fue fiel a la instrucción de alentar el enfrentamiento.
Ahora vendrá la otra parte del acuerdo y que según las versiones de quienes participaron en el, será que la junta de gobierno en el primer año pase a manos de MORENA y su nuevo coordinador parlamentario, el segundo año será para el Partido Revolucionario Institucional y el tercero para Acción Nacional acuerdo que será firmado por todas las fracciones en los próximos días y con ello dar fin al conflicto.
Y desde luego que nada es coincidencia con la visita que hará el próximo domingo el presidente electo Andrés Manuel López Obrador al estado, todo lo contrario, es parte de la operación política, para que cuando ocurra el encuentro con el gobernador Omar Fayad sólo se hable de la coordinación que se tendrá para los próximos años en proyectos comunes que beneficien a la sociedad.
De mi tintero…Durante años quienes ocuparon las dirigencias de Antorcha Campesina en el estado, no sólo han gozado de los beneficios de manejar los recursos públicos que los gobiernos estatales y municipales les liberan para supuestas obras en comunidades pobres y marginadas, también del financiamiento de grupos interesados en mantener marchas y plantones contra las autoridades… Dicen que recién se conoció que de la Universidad del estado salían cheques para mantener las protestas… será?