Conmoción entre la población de Jilotepec, en el Estado de México, por el asesinato de Mauricio, un niño de 8 años de edad. Según la versión del padre, dos hombres los interceptaron para asaltarlos cuando viajaban en su vehículo de la comunidad Llano Grande a la localidad de Aldama. Los asaltantes se llevaron el vehículo con el niño adentro.
El padre intentó detener el auto y a los delincuentes para que el niño pudiera bajar, pero ellos se lo llevaron.
Según los primeros reportes, el menor fue hallado muerto en una comunidad cerca de donde ocurrió el supuesto robo.
La tragedia fue reportada al Ministerio Público, por lo que la Fiscalía del Estado de México inició una investigación.
Sin embargo, las autoridades ya descartaron que se haya tratado de un secuestro o intento de robo de vehículo.
La historia dio un giro inesperado, ya que el padre fue detenido como principal sospechoso de la muerte de su hijo.
A decir de la población, una situación de este tipo nunca se había vivido en Jilotepec, considerado un pueblo tranquilo, donde la mayor parte de la población se dedica al campo y a la ganadería.