Es un hecho o por lo menos es lo que se mantiene en la mesa de las decisiones, que al pasar el segundo informe de gobierno, vendrá el segundo ajuste importante dentro del gabinete del gobernador Omar Fayad, sólo que esta vez no será producto de la coyuntura electoral y sí de la necesidad de fortalecer el equipo interno en el nuevo escenario político en el que sobran al menos 5 secretarios.
Las versiones indican que, el propio mandatario estatal ha confiado en reuniones privadas y personales, que vendrá un ajuste y sólo esperará el tránsito hacia el segundo tercio de su administración, donde habrá de definirse el rumbo que tomarán muchas acciones que se plantearon en el 2016.
Desde hace varios meses, se advirtió que el gabinete parece estar divido en tres grupos, los que dicen que hacen pero no hacen nada, los que apenas cumplen y finalmente los que aportan y apoyan de manera decidida al jefe político del estado y que están presentes en casi la totalidad de las acciones y decisiones.
De los primeros está claro que en 24 meses no han logrado entender la estrategia, dinámica y trabajo de la actual administración y en las últimas semanas apenas concluyó el pasado proceso electoral parecen haber entrado en estado de pánico, la única ocurrencia que tienen es subir comentarios en redes sociales, pero nada de fondo.
El segundo grupo, se escuda en que su labor es técnica y por tanto cumplen horarios rigurosos, se la pasan detrás de su escritorio y dicen cumplir como cualquier oficinista, sin poner talento y aportar en el respaldo de las acciones gubernamentales.
El tercer grupo, el más compacto, es quien acompaña al mandatario, define sus acciones e incluso en varias ocasiones sin consultar, aparecen con sus propios discursos con cierta carga política y mensaje, enfrentan a los adversarios y mantienen una política que consiste en el fortalecimiento del trabajo gubernamental.
¿Los nombres? Son del dominio al interior del propio gabinete y se conocerán en las próximas semanas, pero sí de pistas se trata las y los señalados hasta ahora, sus oficinas no se encuentran físicamente dentro de la sede del ejecutivo estatal.
De mi tintero… A propósito del gabinete hace una semana se distribuyó un correo electrónico donde se hablaba de las “virtudes” de cada uno de los secretarios, los “analistas” prestos a entregar cuentas inmediatas dieron sus hipótesis: “fuego amigo” y “Gerardo Sosa”, la pregunta entonces sería ¿Quién está tan interesado en exhibir “las bondades” de sus compañeros? o bien ¿de este tamaño es la información del jefe del grupúsculo universidad? Digo nomás por preguntar…