— Beneficiará a 10 mil personas en cinco estados de la República; se enfocará a articular los apoyos de 15 programas productivos disponibles en siete dependencias federales
En 2015 se pondrá en marcha el programa “Territorios productivos”, orientado a hogares beneficiarios de PROSPERA que se ubican en municipios donde está presente la Cruzada Nacional contra el Hambre y donde la pequeña agricultura es una actividad importante, afirmó la Coordinadora Nacional de PROSPERA, Paula Hernández Olmos.
Recordó que la transformación de Oportunidades en PROSPERA Programa de Inclusión Social, anunciada por el Presidente Enrique Peña Nieto el 2 de septiembre, y formalizada en el Decreto por el que se crea la Coordinación Nacional de PROSPERA, el 5 de septiembre, incorpora un enfoque productivo, y con ello, articula la política social con la política económica. La inclusión productiva, dijo, pasa a ser de esta manera un pilar central de la estrategia nacional de reducción de la pobreza.
“Estamos incursionando en la política de desarrollo social de nueva generación; la experiencia internacional e incluso casos observados en México mismo, muestran que el enlace de apoyos asistenciales y productivos derivan en una mayor eficiencia de la política social en su objetivo de sacar definitivamente de la pobreza a la población que vive en estas condiciones”, enfatizó Paula Hernández.
El Decreto destaca “que la transformación económica requiere ser acompañada de políticas de desarrollo social modernas y eficientes que permitan a la población más pobre avanzar, desarrollarse y generar para sí mismos y sus familias una mejor calidad de vida, es decir, prosperar”. De la misma manera, esta articulación contribuye al objetivo estratégico de democratizar la productividad.
Es en este marco que nace “Territorios Productivos”, dijo Paula Hernández, quien precisó que el diseño de este programa fue apoyado técnica y financieramente por el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), que es una institución de las Naciones Unidas, así como por el Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo (CIID), corporación pública canadiense.
En 2015 “Territorios Productivos” beneficiará a 10 mil personas en cinco estados de la República, y se enfocará a articular, con una visión territorial, los apoyos de 15 programas productivos disponibles en siete dependencias del Gobierno Federal, que están etiquetados precisamente para población pobre.
Se ha observado, dijo la Titular de PROSPERA, que por diversas razones esta población no accede a esos recursos en la magnitud que debería o lo hace de manera parcial y fragmentada, y con resultados poco eficientes en cuanto a mejora de su producción agrícola y no agrícola, y de su capacidad de autoabasto alimentario.
La propuesta de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2015, que el Ejecutivo entregó al Congreso hace unos días, destaca uno de los objetivos del gasto previsto para la política de desarrollo social: “Mejorar el ingreso de las personas en situación de vulnerabilidad mediante el apoyo y desarrollo de proyectos productivos”.
El documento menciona al programa “Territorios Productivos” y señala que su objetivo será «contribuir a reducir la población rural en condición de pobreza extrema, a través de aumentar su productividad, producción e ingresos autónomos”.
Dice también que “El propósito del programa es que los hogares rurales en condición de pobreza: aumenten sus ingresos obtenidos a través de sus actividades económicas agrícolas y no agrícolas; aumenten su producción de alimentos; aumenten la productividad de los factores de producción de que disponen, y accedan efectivamente a las políticas y programas públicos para los cuales califican”.
El Decreto Presidencial del 5 de septiembre señala que “la lucha contra la pobreza ha sido uno de los pilares fundamentales del Estado mexicano y en las últimas décadas se ha buscado combatirla principalmente con base en políticas de asistencia a los sectores más pobres”, pero, agrega, “la experiencia comparada a nivel internacional y las mejores prácticas en materia de política social en el mundo, demuestran que se ha migrado de políticas asistencialistas a políticas de desarrollo, en las cuales el Estado se convierte en un facilitador para que las personas encuentren los espacios y las fórmulas adecuadas para mejorar sus condiciones de vida”.