El secretario de gobierno Simón Vargas, negó haber recibido información muy temprano el domingo 13 de noviembre, del área de inteligencia o de la propia Subsecretaria en el Valle del Mezquital, que advirtiera del conflicto entre pequeños propietarios y comuneros en la comunidad de Dios Padre en Ixmiquilpan, que derivo en la muerte de un campesino.
El funcionario, hizo alusión a la columna publicada hace una semana en este mismo espacio, y precisó que el conflicto se atendió en cuanto se conoció de la marcha de los pequeños propietarios y a la zona fueron desplazadas dos patrullas y posteriormente se reforzó el operativo con la presencia del Secretario de Seguridad Mauricio Delmar.
Negó haber actuado con negligencia y displicencia, en este conflicto de tierras que lleva varios años y que se encuentra en instancias federales, pues afirmó que la atención a la problemática se dio al momento y que él mismo encabezó reuniones con los involucrados.
Aseguró que el hombre que perdió la vida esa mañana en Dios Padre, pertenece a los comuneros y el disparo lo recibió por la espalda por uno de sus propios compañeros “esa bala mato a dos familias, lamentablemente”, pues puntualizó que ahora hay una persecución en contra de la familia del agresor. También precisó con contundencia que Alejandro Ramírez Furiati fue separado de su cargo tras los señalamientos de ambos grupos de tener intereses en este conflicto y beneficiarse con ello.
Aclaró haber sido columnista del rotativo Eje Central y no quien proporcionaba información en tarjetas. Hasta ahí la versión del responsable de la política interna del gobierno estatal y como en toda historia, siempre hay dos versiones y elementos que se conjugan.
Las elecciones que se tendrán la próxima semana en el municipio de Omitlán, reviste mucho más que la lucha por el gobierno municipal en esa zona de la montaña, será la primera elección en la administración del gobernador Omar Fayad y por tanto la dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) está obligada con su candidato Ulises Hernández a ganar y hacerlo con solvencia.
Las encuestas hasta ahora, dan una contienda cerrada entre el candidato priista y el del Partido Verde Ecologista de México, apenas una diferencia de cinco puntos favorable al abanderado del tricolor, aunque teniendo como referencia los márgenes de error y los pronósticos desfavorables de algunas casas encuestadoras, no se debe caer en excesos de confianza.
Dicen algunos que será el proceso que marcará la salida de Alberto Meléndez Apodaca del Comité Directivo Estatal del PRI, donde por cierto se han dado relevos importantes, cierta o no esta versión, es un hecho que la estructura del edificio de Colosio mantiene un activismo importante en esta elección y ya prepara incluso a su equipo jurídico.