Ismael El Mayo Zambada, líder fundador del Cartel de Sinaloa, se declarará culpable el próximo lunes 25 de agosto de diversos cargos de narcotráfico ante la corte del juez Brian Cogan, a cambio de posibles beneficios en la pena que se le imponga y de, probablemente, volverse testigo colaborador de los Estados Unidos.
Los registros judiciales de la corte federal en Brooklyn, Nueva York, señalan que la audiencia de declaración de culpabilidad se llevará a cabo a las 12:00 horas.
El anuncio viene precedido del aviso que los fiscales estadunidenses enviaron, donde informaron que no buscarían la pena de muerte para Zambada.
En la audiencia del 25 de agosto se conocerá tanto el total de delitos de los que se declarará culpable El Mayo, a quien se le imputan 21 cargos en total, así como las cláusulas y condiciones del acuerdo de culpabilidad que haya pactado y firmado con el Departamento de Justicia.
En la mayoría de los casos (por ejemplo, con Ovidio Guzmán hace unas semanas) estos acuerdos contemplan cláusulas obligatorias de colaboración con el gobierno de los Estados Unidos, en los que el acusado se compromete a aportar información y datos sobre su organización delictiva, sus complicidades, y sus recursos. Todo ello a cambio de una recomendación de una sentencia menos gravosa en su contra.
Zambada García fue detenido el 25 de julio del año pasado en un aeródromo cercano a El Paso, Texas, luego de bajar de un avión en el que, según lo dicho por el capo, viajó en contra de su voluntad y secuestrado por Joaquín Guzmán López, hijo menor de El Chapo Guzmán.
Aunque inicialmente fue procesado en Texas, el 13 de septiembre El Mayo fue trasladado a Nueva York para ser presentado ante la Corte del Distrito Este de dicha jurisdicción federal en Brooklyn, donde se encontraba la acusación de mayor gravedad, con cargos de tráfico de fentanilo.
En la audiencia inicial el equipo de fiscales (el mismo que llevó el proceso contra Genaro García Luna) anunció que la posibilidad de una pena de muerte en contra de capo estaba sobre la mesa debido a la gravedad de sus delitos. Ello aceleró las conversaciones entre las partes en búsqueda de un arreglo.
El proceso continuó con su avance regular en preparación de un posible juicio hasta que el pasado 5 de agosto los fiscales de Estado Unidos enviaron una notificación al juzgado, en el que anunciaban que por acuerdo de la Fiscal General del país (Pamela Bondi), renunciaban a buscar una sanción de pena de muerte en el caso.