En mi columna de la semana pasada, hice referencia a los 10 mil expedientes rezagados que encontró el Procurador Ramiro Lara Salinas a su llegada en el 2016 y que no era lo único que lo había sorprendido, pues hay irregularidades en la construcción de instalaciones autorizadas dentro del nuevo sistema de justicia penal, que presumen mal uso y abuso de recursos públicos, pues por ejemplo, se había iniciado la construcción de un tina en el despacho de la Subprocuraduría del Sistema Acusatorio y Oral, todo esto herencia de la administración de Alejandro Straffon Ortiz.
Al respecto el ex procurador Alejandro Straffon Ortiz me envió las siguientes consideraciones vía twitter que a continuación reproduzco textual:
Sobre la nota que hoy se publica en el diario La Crónica te solicitó realizar algunas consideraciones:
El rezago en integración de averiguaciones previas y luego carpetas de investigación siempre se abatió, todos y cada uno de los años en que estuve al frente de la PGJEH disminuyó el número de integraciones rezagadas, eso es fácil de comprobar en los registros de la dependencia.
Por otra parte la infraestructura de los CESI de Pachuca, Tula y Tulancingo fueron autorizados por la Secretaría de Hacienda en 2014 y para el 2016 se realizó la construcción, ya no alcanzó el recurso por lo que la obra se detuvo siendo yo aún procurador.
Asimismo la PGJEH no planeó ni realizó las obras, fue la SOPOT como debes saber, por lo que no tuve injerencia en tal proceso.
Te ruego la publicación de lo anterior como parte de mi derecho de réplica constitucional.
NdR
Los registros justamente de la Procuraduría de Justicia del Estado de Hidalgo (PJEH) a los que se refiere el ex procurador Alejandro Straffon, señalan todo, menos una disminución del rezago de averiguaciones previas hoy carpetas de investigación durante su gestión. La única imprecisión es que no fueron 10 mil sino 42 mil 147 los asuntos que dejó pendientes el ex servidor público, tal como públicamente lo dio a conocer el actual fiscal Javier Ramiro Lara Salinas (crónica 3-4-17).
Respecto a los edificios de los CESI de Pachuca, Tula y Tulancingo, estos no fueron recepcionados por la actual administración, debido a las irregularidades que hice públicas y que vuelvo a reiterar, se intentó construir una tina tipo jacuzzi en el despacho de la Subprocuraduría del Sistema Acusatorio y Oral y los edificios no cuentan con las especificaciones técnicas y de utilidad, que señala la norma para este tipo de construcciones, lo cual también es fácil de comprobar en los documentos de entrega recepción de la Secretaria Contraloría y de la Auditoria Superior del estado.
Por último como debe saber el ex fiscal, no fue la SOPOT quien planeó y realizó las obras, sino una constructora privada, pero la validación y autorización del expediente técnico sí debieron pasar por la Secretaría de obras Públicas y del despacho del procurador en turno, a menos que Alejandro Straffon no estuviera enterado de lo que ocurría en la oficina que ocupó.
El tema ahora está en las instancias encargadas de verificar y sancionar en todo caso si hubo irregularidades y mal uso de recursos públicos, por comisión u omisión y no en los medios de comunicación..
Servido.