Asegura el presidente de la Federación Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (Fioac), Francisco Cheuw Plascencia, que con la puesta en marcha de la planta de tratadora que construye el gobierno federal en Atotonilco de Tula, sólo de se da un paliativo a la contaminación de agua en esa región del estado.
Señaló que el verdadero problema es más complejo ya que la contaminación de agua tiene varias aristas, una de ellas es la llegada de las aguas negras del Valle de México y que a través de esta planta se pretende convertir en grises, sin embargo estas seguirán contaminadas, ya que no hay una coordinación con las áreas municipales que vierten sus Residuos.
Agregó que tanto las aguas residuales de diversos municipios de la zona y de empresas, son arrojados sin control al desagüe que va a parar a los ríos, «sin duda faltó una coordinación con las autoridades locales para tener un proyecto integral ya que de nada sirve que el agua se trate en una parte y se contamine en otra.
Chew Plasencia afirmó que la Planta de tratamiento que se construye en Atotonilco podrá limpiar el agua con la que se irrigan 100 mil hectáreas de cultivo de 14 municipios entre ellos Tula, Ajacuba, Tlaxcoapan, Chilcuautla, Tezontepec, Atotonilco, Ixmiquilpan entre otras demarcaciones. La contaminación del agua en esta región mantiene además de partículas de metales, coliformes, aceites, pintura entre otros contaminantes.
Aseguró que a contaminación en el agua es de extrema gravedad, afirmó el activista, quien acusó que a partir de este deterioro ha crecido el número de personas enfermas en toda la región donde se tienen problemas estomacales, en la piel y riñones como resultado de los contaminantes.
Por último refirió que con el saneamiento de la presa Endho se tendrá una mitigación importante del problema, pero las acciones no deben de quedar ahí, ya que se debe de ofrecer a los habitantes afectados una garantía para su salud y calidad de vida para todos los de la región.