Con la participación de 18 equipos de primer nivel, mañana se pone en marcha la segunda edición de la Copa Ram, en el Lienzo Charro “La Guadalupana” de Apaseo El Grande Guanajuato, donde la actividad se prolongará hasta el próximo domingo.
Entre los participantes por supuesto hay representantes de la entidad que vio nacer el deporte nacional, son tres los equipos hidalguenses que forman parte del elenco, entre ellos los actuales campeones estatales, la Asociación Francisco I. Madero.
Mañana las acciones comenzarán a las 11:30 horas con la participación de los subcampeones nacionales y recientemente coronados en el circuito Excelencia Charra, Tres Regalos de Quintana Roo, además de Tamariz CYM de Puebla y los guanajuatenses de Juventino Rosas.
En el encuentro de las 14:30 horas se verán las caras Regionales de San Julián de Jalisco, los poblanos de Hacienda Tamariz Cuauhtémoc de Nuevo León. A las 17:30 horas comenzará la charreada en que se presentarán los hidalguenses Regionales de Huichapan, junto con los anfitriones de Apaseo el Grande y los tapatíos de Agua Santa.
Los campeones 2013 de la entidad, Francisco I. Madero y los del año pasado, la Asociación José Eduardo Ochoa Reyes verán acción el sábado a las 11:30 horas, al compartir el ruedo con con Fuerza Mexiquense, en busca de uno de los seis boletos para la final.
La actividad de la fase eliminatoria la cerrarán Rancho la Biznaga del Estado de México, Ex Hacienda San Bartolo de Michoacán, Valle de Saltillo y Sierra Zapalinamé de Coahuila, Rancho El Ayate de Chiapas y Puente de Camotlán de Nayarit.
Cabe recordar que el año pasado los campeones de la categoría AAA fueron los charros de Hacienda Tamariz, que recién habían ganado el Circuito Excelencia, así que en esa lógica y por supuesto por su desempeño reciente y en el pasado campeonato nacional, uno de los favoritos es el escuadríon de Tres Regalos.
Por supuesto sin soslayar que también en 2012 los que se ubicaron como subcampeones de la Copa RAM fueron los Regionales de Huichapan, que llegan a esta edición con ánimo de revancha para colocarse en lo más alto de la competencia.