Sólo faltaba un out en la pizarra para empezar el festejo cuando vino el error que impulsó una carrera más y puso un elemento en la antesala, la distancia aún era considerable pero algo de nerviosismo puso silencio en la tribuna hidalguense, hasta que un elevado que se fue de foul fue capturado por el tercera base y entonces se liberó el grito postergado ¡Hidalgo, Hidalgo, ra, ra, ra!.
El objetivo se había cumplido, la escuadra de la Liga Pequeña de Beisbol de Hidalgo (LPBH) le ganó por 8 – 4 a su similar de la Liga Miguel Hidalgo (antes Petrolera) y con ello obtuvo su boleto a la fase regional de Williamsport, que este año tendrá como sede a la blanca Mérida, Yucatán.
Los padres de familia empezaban a entrara al campo cuando el manager del equipo, Maximino García llamó a sus muchachos y les pidió una porra para los papás, quienes por supuesto se emocionaron al escuchar multiplicada en fuerza de gargantas la porra que momentos antes habían gritado con emoción.
Con su estratega al frente el equipo se salió del montículo y se fue al jardín central, jubilosos, pero cansados por el esfuerzo durante tres días de competencia, lo muchachos se sentaron en el pasto y habló Max, como fraternalmente conocen a su manager.
“Muchachos, hoy jugaron de verdad como gente grande, a esto me refería, ya ven como si se puede, ustedes pueden y lo han demostrado, gracias y muchas felicidades, aunque por supuesto tenemos fallas que corregir, pero han hecho un excelente trabajo”.
Al breve mensaje siguió un aplauso y la palabra pasó a Gustavo Pérez, couch de la Liga de Tula que se sumó al trabajo del combinado estatal y quien tuvo que hacer una pausa en su intervención, cuando de reojo vio a un grupo de padres que se aproximaba con el resto de la bebida rehidratante para vaciarla sobre Max, quien tembló de frío y sonrió de emoción con el tradicional festejo de quien se corona campeón.
Los visitantes al campo de pelota caliente en la Unidad Deportiva Municipal de Pachuca empezaban a marcharse, agradecieron la hospitalidad hidalguense y los locales no dejan de festejar, también agradecieron a los estrategas del equipo y Pedro Solares Soto, presidente de la LPBH.
Ataviado con huaraches, guayabera, pantalón y sombrero blanco, Solares Soto se dijo listo para viajar a Mérida con el equipo campeón de la etapa distrital, su vestimenta es parte de una mentalidad ganadora, de un forma de expresar que estaban listos para obtener el boleto, asintió.
El dirigente reconoció que muchos de los jugadores visitantes a la capital hidalguense tienen un mejor nivel técnico que los de casa “yo creo que nos mueve el hambre de triunfo, la actitud, la garra, han sido la diferencia y ya nos sirvió para calificar a dos equipos a sus respectivos regionales”.
Solares Soto también anunció que de inmediato se pondrá de acuerdo con el cuerpo técnico, padres de familia y jugadores, para programar juegos de preparación antes del regional en Yucatán, que será del 14 al 17 del mes próximo.