Debido al alto índice de contagios por Covid-19 en Estados Unidos y México, la frontera terrestre entre las dos naciones permanecerá cerrada hasta el 21 de enero próximo, las restricciones se mantendrán en los mismos términos en que se han desarrollado desde su implementación, solamente se permiten viajes esenciales, a consideración de la autoridad migratoria.
A través de su cuenta de Twitter, la Secretaría de Relaciones Exteriores escribió:
“Tras revisar el desarrollo de la propagación de #COVID19 y debido a que diversas entidades se encuentran en color Naranja del Semáforo Epidemiológico, Bandera de México planteó a Bandera de Estados Unidos la extensión por un mes más, de las restricciones al tránsito terrestre no esencial en su frontera común”.
El 21 de marzo, México y Estados Unidos cerraron sus fronteras para viajes no esenciales, es decir, aquellos con fines recreativos o turísticos.
Además, también han frenado los procesos migratorios abiertos en Estados Unidos, dejando, según denuncian ONG, a miles de migrantes varados en la frontera norte mexicana. En cambio, las restricciones establecidas no impiden el tránsito comercial de alimentos, de combustible, de equipos de atención médica y de medicamentos por la frontera entre ambos países.
La frontera de México con Estados Unidos, que se extiende a lo largo de más de 3,000 kilómetros, es además una de las más activas del mundo con más de un millón de personas que cruzan cada día y se intercambian bienes y servicios por un valor de 1,700 millones de dólares diarios.
Actualmente, Baja California se encuentra en semáforo rojo por el alto número de contagios diarios en la entidad, la cual suma casi 30 mil infecciones desde el inicio de la epidemia que han provocado el deceso de 4 mil 662 personas.
El resto de las entidades fronterizas, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas se encuentran en semáforo naranja, lo cual implica tomar medidas restrictivas que afectan el comercio terrestre en la frontera más transitada del mundo.