Muchos de nosotros vemos al impacto ambiental solo como una problemática donde por más esfuerzos que se tengan en este rubro no se logra un avance palpable; en los últimos años se ha tenido una mayor generación de residuos, la tasa de deforestación se ha elevado, aunado al incremento de los fenómenos causados por el calentamiento global.
Sin embargo, debemos ampliar nuestro panorama para no solo ver estos efectos ambientales como problemas, sino como generadores de oportunidades, de ahí la importancia de este día mundial del medio ambiente, que lleva como lema la economía verde.
La importancia del cuidado del medio ambiente, no solo nos trae beneficios ambientales y sociales, sino también económicos, por medio de la creación de empleos que tengan el fin de disminuir el impacto ambiental.
La nueva economía verde es por lo tanto, una propuesta alternativa y mucho más sostenible de hacer negocios, apoyar a la economía nacional y disminuir los índices de pobreza.
Esta economía verde tiene como resultado mejorar el bienestar humano y la equidad social, reduciendo significativamente los riesgos ambientales y la escasez ecológica; siendo un sistema socialmente inclusivo.
Independientemente de los beneficios ambientales, la inversión en una economía verde se refleja en varios informes como un agente para la creación de millones de nuevos puestos de trabajo, según el informe sobre trabajos verdes del PNUMA. (Programa de las naciones unidas para el medio ambiente)
Tomando en cuenta el factor económico, para México los costos para aminorar el impacto ambiental de los procesos productivos de las empresas son elevados, ascendieron, en 2010, a 941 mil 670 millones de pesos, lo que equivale al 7.9% del producto interno bruto (PIB), de acuerdo con el instituto nacional de estadística y geografía (Inegi).
Otro gasto fue ocasionado por un manejo indebido de nuestros residuos sólidos urbanos, cifra que correspondió a 40.7 millones de pesos. Por otro lado, la secretaria de hacienda y crédito público dejó de ganar, aproximadamente, 14 mil millones de pesos, debido a que el sector del reciclaje no cuenta aún con un mecanismo de deducción de compras.
Cifras que disminuirían considerablemente si en lugar de remediar los impactos, comenzáramos a eliminarlos desde su raíz, generando empleos y procesos que conserven el planeta, minimicen las emisiones de carbono, mejoren la eficiencia energética, eviten la pérdida de biodiversidad y erradiquen la pobreza.
Uno de los principales retos a vencer en la actualidad es el desempleo, donde nos encontramos con una tasa de desocupación de 4.86% de la población económicamente activa, en la encuesta nacional de ocupación y empleo (ENOE). En la cual se encuentran miles de jóvenes muchos de ellos profesionistas, hombres y mujeres que cuentan con un oficio sin poder aplicarlo, personas que no cuentan con la valiosa información de la creación de riqueza por medio del cuidado del ambiente.
La transición hacia una economía verde podría generar entre 15 y 60 millones de empleos adicionales en el mundo durante las próximas dos décadas y ayudar a decenas de millones de trabajadores a salir de la pobreza, según un informe de la organización internacional del trabajo (OIT).
Alrededor del mundo encontramos experiencias enfocadas a empleos verdes, como es el caso de Estados Unidos y Brasil, donde se crearon 3 millones de empleos relacionados con productos y servicios medioambientales. En Alemania, el programa de renovación de edificios para mejorar la eficiencia energética ha movilizado 100 mil millones de dólares en inversiones, y este proceso está reduciendo las facturas de energía, evitando las emisiones y creando cerca de 300 mil empleos al año.
Donde la economía verde es por lo tanto, no sólo una moda pasajera medioambiental sino que es una de las mejores soluciones disponibles para el crecimiento económico sostenible que reconoce el componente social.
Por otro lado, se estima que para el 2012, a nivel global, generaremos unos 2,500 millones de toneladas de residuos sólidos urbanos como latas, botellas de plástico, frascos de vidrio, chatarra, papel, cartón y periódico; que mediante el reciclaje será la principal materia prima para creación de nuevos productos y motor de nuevos procesos.
Tomando en cuenta que en México se generan más de 40 millones de toneladas de residuos sólidos al año, es aquí donde tendríamos una significativa área de oportunidad de generar empleos y disminuir el impacto ambiental, magnificando la recolección y el reciclaje que solo es de un 14% a nivel nacional.
Para revertir la economía global y elevar el empleo, en México existen diferentes acciones que podemos llevar a cabo para colocarnos dentro de la economía verde, como lo son el transporte con tecnologías limpias, por ejemplo la utilización del ferrocarril, el reciclaje, el uso de energías renovables, la aplicación de los servicios ambientales en comunidades marginadas con lo que erradicamos la deforestación, el fomento de la agricultura sostenible e incrementar la eficiencia de energía de nuevos y viejos edificios.
En el marco de este día mundial del medio ambiente mi postura va a encaminada al desarrollo de una economía verde para Hidalgo; a explotar el potencial ambiental y humano de cada región de la entidad, para que nuestros gobernantes de los diferentes niveles tomen las acciones necesarias en los sistemas educativos y laborales para preservar la naturaleza y al mismo tiempo se fomente la generación de empleos, impostergable para el progreso de nuestro estado.