— La Institución exhorta a los padres de familia para que procuren un refrigerio balanceado y saludable
Proporcionar un lunch con alimentos poco nutritivos es tan dañino para los menores como la ingesta de un lunch muy basto a la hora del recreo escolar, señaló el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Hidalgo
María Teresa Mejía Olvera, coordinadora delegacional de Nutrición y Dietética en la Institución, explicó que los alimentos más recomendados para integrarse a un lunch escolar son: frutas de temporada, algunas semillas y agua natural –preferentemente- o agua de fruta.
Sin embargo, dependiendo del tiempo que vayan a permanecer en la escuela y según las edades, son las porciones que se deben proporcionar a los menores; si son más horas hay que darles algo más sustantivo, por ejemplo una torta o sándwich elaborados de manera balanceada con productos nutritivos, alguna verdura, lácteos como crema o queso panela y proteínas animales como jamón, para la adecuada nutrición de los menores.
De igual manera, es muy importante evitar jugos y bebidas gaseosas, industrializadas y con edulcorantes artificiales, frituras o fritangas, panecitos o pastelería empaquetada, los cuales son altamente calóricos y aportan gran cantidad de grasas no saludables que se acumulan en el cuerpo. Procurar retirarlos definitivamente de la dieta diaria no sólo del lunch escolar
Puntualizó que la colación es la quinta parte del aporte calórico a consumirse en todo el día, por lo que debe ser únicamente el alimento que permita tener la energía suficiente hasta que se pueda consumir el siguiente servicio de alimentos, que sería a la hora de la comida fuerte.
Cabe destacar que es imprescindible que al inicio de las actividades diarias se haya consumido ya algunos alimentos como desayuno ligero, es decir, una porción de fruta, cereales –contenidos también en pan- y jugo o leche; el desayuno es muy importante para los niños porque de esa cantidad y calidad de alimento depende la energía que tengan para llevar a cabo sus actividades, si no se cuenta con una alimentación balanceada entre hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas y minerales, el funcionamiento cerebral no será el más óptimo. Por el contrario, si el desayuno o el lunch escolar es altamente calórico lo que producirá será somnolencia, cansancio y desgano; entonces el rendimiento también será limitado.
La Coordinación de Nutrición y Dietética subrayó que toda la población debe mantener como hábito una alimentación balanceada en todas las comidas del día, procurar un producto de cada grupo alimenticio, consumir cinco porciones de frutas o verduras al día, tomar suficiente agua (ocho vasos como mínimo) y hacer ejercicio por lo menos 30 minutos diariamente.