La promoción de la occidentalización como parte del desarrollo que impulsa el gobierno federal en el país es una de las principales causas que ponen en riesgo las lenguas indígenas en los pueblos originarios de Hidalgo, afirmó el director del centro estatal de lenguas y culturas indígenas en el estado, Alberto Avilés Cortés.
Al respecto refirió que desde la llegada de los españoles y hasta a la fecha el 50 por ciento de las lenguas que se hablaban se han perdido, esto es que hasta antes de los españoles, los pueblos en México hablaban 160 lenguas y en la actualidad solo hay 69 de las cuales la mayoría se han comenzado a perder.
El funcionario que el refirió que en la entidad se conservan a la fecha solamente tres lenguas predominantes que son la Otomi, náhuatl y Tepehua esta última es la que corre un mayor riesgo ya que de acuerdo al Censo del 2010 del INEGI, solo se tienen mil 800 hablantes y estos se concentran únicamente en Huehuetla.
Avilés Cortés, afirmó que en el Valle del Mezquital se tienen a 127 mil hablantes en 29 municipios como Ixmiquilpan, Huehuetla, San Bartolo, entre otros, mientras que en el caso del náhuatl se tiene a 245 mil hablantes en ocho municipios de la huasteca entre ellos San Felipe Orizatlan, Huautla, Huejutla, además de algunos de la Sierra, que también viven bajo el mismo riesgo y por las mismas razones basadas en un desarrollo igualitario.
Destacó que es lamentable que sean los programas asistencialistas del gobierno federal los que ponen en riego la lengua de los pueblos originales, debido a que no hay un entendimiento de su conformación y desarrollo, además de que por esos medios se les ha obligado a tener que expresarse en castellano por lo que de manera paulatina se pierde el interés por la lengua materna.
Finalmente dijo que el desarrollo es una palabra a la que hay que tenerle mucho cuidado debido a que se confunde y en consecuencia se trata de occidentalizar a las comunidades. No tener un celular o una televisión es sinónimo de pobreza y confunden cultura con folclor.