El Organismo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) denunció a través de Dora Giusti, jefa de Protección a la Infancia de Unicef México que autoridades migratorias mexicanas separan de sus familias a niños mayores de 12 años provenientes de Centroamérica.
De acuerdo con el organismo, las autoridades mexicanas suelen detener y llevar a los niños mayores de 12 años a una zona separada de sus familias, mientras que a los más pequeños se les permite permanecer con su madre o algún familiar. Dora Giusti mencionó que se han detectado casos de menores que pasan hasta tres meses detenidos y que no se les permite salir para hacer uso de servicios ni con fines de ocio, ni siquiera en casos en los que el proceso de determinación de su condición de migrantes o refugiados sea largo.
A través del informe «Desarraigados en Centroamérica y México. Los niños migrantes y refugiados se enfrentan a un círculo vicioso de adversidad y peligro», difundido por la UNICEF al menos 286 mil 290 migrantes que viajaban a Estados Unidos fueron interceptados en la frontera norte de México entre octubre de 2017 y junio de 2018. De ellos, 37 mil 450 eran menores de edad que emprendieron la travesía solos.
Durante los dos últimos años, más de 60 mil niños migrantes fueron detenidos en territorio mexicano y permanecieron retenidos en centros de detención; el 90% de ellos fueron deportados a sus países de origen.
Los procesos de repatriación difieren mucho, en los casos de niños procedentes de Guatemala, son retornados en camión y ubicados en un albergue en la frontera, desde donde se contactan las familias, sin embargo el proceso con los menores hondureños y salvadoreños se demora más, puesto que las deportaciones se hacen en avión y deben ser costeadas por las autoridades del estado mexicano donde se detuvo al menor, y no siempre tienen el presupuesto para hacerlo
Unicef exhortó a las autoridades mexicanas a poner fin a la práctica de detención de niños por su condición de migrantes, así como a protegerlos de la violencia, mantener sus familias unidas y abordar las causas estructurales que les obligan a huir de sus países de origen, como la falta de desarrollo económico y la violencia en Centroamérica.