Internos del Centro de Reinserción Social de Pachuca desde hace algunos años han dedicado su tiempo para crear un artículo que miles de personas utilizan, los balones de futbol, dicen que fabricar un balón les ayuda como terapia en el proceso de reinserción social.
Son poco más de cuarenta internos del CERESO de Pachuca que día a día dedican un promedio de ocho horas en la fabricación de balones, mismos que se comercializan en tiendas deportivas de la ciudad o en otras partes del estado.
En el CERESO de Pachuca existen una gran variedad de oficios, carpintería, costura, algunos hacen artesanías otros más piñatas, pero un grupo se dedica a la creación de balones casi de una manera artesanal.
El material llega cortado al CERESO, los casi cuarenta internos que trabajan este oficio se dedican a ensamblar pieza por pieza, con las manos y una pequeña agua, los internos cosen cada parche del balón para al final colocar un hule conocido como cámara y entregar el balón para su venta.
José Hugo Hernández Torres, encargado de los baloneros del CERESO dice que a la semana producen un aproximado de 700 balones y los recursos que generan a través del oficio los reos los utilizan para sus gastos personales o para ayudar a sus familias.
Comento que para realizar una pieza ya con práctica se llevan un lapso de una hora o algunos más experimentados hasta cuarenta minutos por balón, sin embargo algunos internos menos experimentados pueden pasar cinco horas para llegar al terminado.
Además de ser un oficio algunos internos aseguran que trabajar dentro del CERESO les ayuda como terapia para que su vida se torne más sencilla, tal es el caso de Francisco Valdez Cruz quien es oriundo de Huichapan y que está recluido desde hace nueve años.
Don Panchito como lo conocen cumple una sentencia de 30 años y trabajar como balonero lo ha ayudado a no sentirse, como dicen ellos “carceleado”, menciona que en algunas ocasiones les llega la soledad y lo único que los fortalece para salir adelante es trabajar.
Dice que día con día se levanta a las cinco de la mañana toma una ducha y empieza con sus labores cotidianas, llega al taller toma sus herramientas de trabajo y se va a su celda a coser los balones de futbol. Hasta el momento asegura que este trabajo le ha evitado muchos conflictos y problemas pues centra todas sus energías en la elaboración de los balones.
En la actualidad el CERESO de Pachuca cuenta con una población total entre hombre y mujeres de 1334 internos de esta cifra poco más del 80 por ciento cuenta con un empleo dentro del CERESO, sin embargo para continuar con sus actividades deben presentar buena conducta.
“Yo les he recalcado a todo el personal de internos e internas que para todos estos trabajos todos los apoyos que la dirección les pueda brindar les requiero principalmente de la disciplina, comportamiento y el trabajo” comentó Noé Vite Rivera, director del CERESO de Pachuca.