La flor de cempoalxóchitl también conocida como flor de muerto es parte fundamental de las celebraciones de esta temporada ya que está presente en los altares que instalan.
En Hidalgo las principales regiones productoras del cempoalxóchitl están establecidas en los municipios de Metzquititlán, Tezontepec de Aldama y Tula de Allende.
Durante 2012, se produjeron 588.68 toneladas de esta flor, con un valor comercial de alrededor de 3 millones de pesos.
Para la temporada de 2013 se estima una producción comercial de 455 toneladas, con una derrama estimada de 2 millones 300 mil pesos, sin embargo gran parte de la producción de cempoalxóchitl se hace en cultivos de traspatio y es para auto consumo, sobre todo en la región serrana y huasteca de Hidalgo, donde la siembra de la flor es parte del rito del Xantolo.
La celebración del Día de Muertos tiene su origen en las culturas prehispánicas de México, las cuales en la temporada de cosecha ofrecían una parte de la producción a sus deidades y a sus ancestros en agradecimiento por lo obtenido y por compartir sus conocimientos para el manejo de la agricultura.
A través del Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS), la SAGARPA coordina programas para la conservación y aprovechamiento de este cultivo, con el apoyo de investigadores de diversas instituciones y productores.
En 2008, se constituyó la Red de cempoalxóchitl y desde entonces se han venido apoyando proyectos en cuatro áreas estratégicas: conservación in situ, conservación ex situ, uso y potenciación de recursos, y creación de capacidades.
Uno de las más importantes contribuciones para el aprovechamiento sustentable de especies de cempoalxóchitl es el trabajo que se ha desarrollado para la obtención de bioplaguicidas, a partir de un proceso de destilación.