Familiares de los internos recluidos en el centro de readaptación social de Tulancingo realizaron una protesta afuera de las instalaciones del centro penitenciario para manifestarse en contra de los supuestos abusos que sufren sus familiares a manos de otros presos sin que los custodios intervengan para mantener el orden.
A las 10 de la mañana de este lunes un grupo de familiares de internos que acaban de ser ingresados a este centro penitenciario arribaron a las instalaciones donde mostraron pancartas de protesta en las que exigían orden al interior de la cárcel y que cesen los abusos que aparentemente sufren los presos por parte de sus mismos compañeros.
Los inconformes aseguraron que sus familiares recluidos les han dicho que sufren de violencia física constante la cual no es detenida por los custodios ni las autoridades del penal, ante este señalamiento los familiares pidieron la renuncia del director de este centro Artemio Ramos.
José Ignacio Naranjo y la señora Ángela Gómez señalaron que a sus familiares otros reos les piden cantidades de dinero que oscilan entre los 2 mil y 5 mil pesos para no agredirlos físicamente, también denunciaron que al interior de este reclusorio hay todo tipo de puestos y venta de alimentos aun cuando a los familiares les prohíben ingresar frutas, verduras y otros insumos.
Así mismo señalaron que los reclusos deben pagar o adquirir suministros para realizar la limpieza en el lugar y ellos al visitarlos tienen que proporcionarles dinero para que no sufran ningún tipo de agresión, los inconformes aseguraron que realizaran una denuncia ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y solicitarán una supervisión a las condiciones del CERESO.
Por su parte el director del centro de readaptación Artemio Ramos salió hasta el último filtro del CERESO y separado por una reja negó que se susciten este tipo de eventos y señaló que a veces ocurren peleas pues se cuenta con 600 internos pero siempre se les brinda atención, finalmente invitó a los familiares inconformes a ingresar al penal para verificar que sus familiares se encuentran en buenas condiciones.