Derivado de la sobreexplotación y agotamiento de agua que existe en el país, la Dirección Local de la CONAGUA, Benjamín Rico Moreno dio a conocer que suspenderá la libre perforación de pozos, por lo cual mantendrá veda total en la entidad y así contar con un ordenamiento sobre la extracción de agua.
Benjamín Rico Moreno, director local de la Comisión Nacional del Agua, menciono que los usuarios que cuenten con aprovechamientos subterráneos en acuíferos, tienen como máximo un periodo de 60 días hábiles a partir del 5 de abril, para solicitar su registro, en este caso, el gobierno federal será el responsable de otorgar o no dicho registro.
El funcionario federal, dio a conocer que de los 22 acuíferos con los que cuenta la entidad, tres de ellos presentan problemas de disponibilidad y sobre explotación, Valle de Tulancingo, Huichapan-Tecozautla y Cuautitlán-Pachuca, por lo que resulta imposible continuar con la extracción del vital líquido.
Cabe hacer mención, la CONAGUA anuncio que estará prohibida la construcción de obras de infraestructura, o la instalación de cualquier otro mecanismo que tenga como finalidad alumbrar e incrementar la extracción de agua del subsuelo, esto para los pozos que presentan problemas de disponibilidad.
La sobre explotación en los mantos acuíferos es tal que, en el Huichapan-Tecozautla se tiene una recarga de 35 millones de metros cúbicos, mientras que se extraen cerca de 52 millones de metros cúbicos; en Tulancingo se recargan de 60 millones de metros cúbicos y se extraen 111 millones, y en el Cuautitlán-Pachuca tiene recarga de 546 millones de metros cúbicos y la extracción es de 751 millones.
Respecto a los pozos donde no hay tanto problema de abatimiento, Benjamín Rico Moreno, sostuvo que podrán autorizar la perforación de nuevos pozos o la construcción de obras de infraestructura, siempre y cuando esté regulado por lo establecido en la Ley de Aguas Nacionales y su Reglamento.
De los 84 municipios de la entidad, 20 de ellos están en veda total, mientras que 15 parcial y los 49 restantes de libre alumbramiento. De tal forma que de no haber un control de recursos, existen riesgos de abatimiento de los niveles de agua, deterioro en su calidad e incremento en el costo de bombeo y posteriormente la inutilización de los pozos.
Por su parte, Benjamín Rico Moreno, catalogo la actual temporada de estiaje como crítica en la entidad, pues a pesar de que el agua para las zonas de riego se ha tratado de repartir de manera equitativa y controlada ésta no es suficiente para abastecer a los campesinos de la región.
Señalo que uno de los problemas que tiene mayor impacto entre el sector agrícola, son los bajos niveles en las presas, mismas que se encuentran por debajo del 50 por ciento de sus capacidad de almacenaje.
En este sentido, Benjamín Rico dio a conocer que la prese Requena tienen un abatimiento del 27.47 por ciento, la presa Endhó cuenta con un volumen disponible de 47.83 por ciento, en la Rojo Gómez un 53.9 por ciento, mientras que la Vicente Aguirre cuenta con tan sólo un 17.9 por ciento de su capacidad.
De tal forma, aseguro el funcionario federal, se están implementando una serie de estrategias para el reparto equitativo del vital líquido, resaltando la respuesta de los campesinos de la entidad y jefes de los diferentes módulos de riego, quienes con mucha sensibilidad han entendido que el problema de desabasto de agua es un problema que compete a todos.
Asimismo Benjamín Rico Moreno, sostuvo que al día de hoy han enfrentado esta crisis de estiaje en las zonas de riego tratando de que el daño a los campos sea el menor posible, sin embargo reconoció que a la fecha no hay agua suficiente para las zonas agrícolas de la entidad por lo que esperan que a partir del 15 de Junio cuando empieza la temporada de lluvias comiencen a recuperar su capacidad de almacenaje las presas y se tenga el agua suficiente para abastecer a las miles de hectáreas de cultivo que en este momento están en riesgo precisamente por la falta del vital líquido.
De acuerdo a algunos pobladores y campesinos de la región, es triste observar cómo día a día se van secando las presas de la región a consecuencia de la falta de lluvia. Esta situación los ha venido a perjudicar en todos los aspectos pues con la falta de lluvia el ganado no tiene dónde pastar y los campesinos no pueden trabajar sus parcelas.
En este sentido, Santos Nery comentó que algunos campesinos de su comunidad a la fecha no han sembrado pues sólo sus cultivos crecen unos centímetros y de ahí están destinados a secarse, lo que tiene como consecuencia que se encarezcan los productos que se obtienen del campo.
Asi que para los productores su única esperanza es que las lluvias se adelanten y comiencen a recargarse los mantos acuíferos antes de que miles de hectáreas se pierdan y cientos de cabezas de ganado mueran por falta de alimento y agua.