Ahora que se discuten los sueldos que eroga el estado por el trabajo de los representantes del Poder Judicial, vale la pena revisar las percepciones de quienes tomarán posesión esta semana en el Congreso local y en los ayuntamientos y comparar lo productivo y constructivo que resulta su trabajo contra los millones de pesos que se desembolsan.
Veamos, cada legislador local percibe 268 mil pesos mensuales, desglosados de la siguiente manera: sueldo 48 mil 751, más 100 mil pesos de gestión social, 50 mil más por desarrollo parlamentario, agréguele 10 mil a los coordinadores de bancada y 60 mil en promedio por pago de asesores, lo que significa que, mensualmente se tiene que cubrir 8 millones 62 mil 530 pesos en sueldos de los 30 diputados que sumados son 96 millones 750 mil 360 pesos, que nos cuesta el poder legislativo cada año.
Ahora veamos su trabajo e influencia, el legislador al que más iniciativas le aprobaron fue Julio Valera Piedras, con 236 en mil 95 días de trabajo, ahora vayamos al otro extremo, Francisco Xavier Berganza tuvo 22 iniciativas aprobadas en los mismos 3 años, es decir ni siquiera una al mes en los 36 que ocupó un escaño.
En el caso de las legisladoras, la que tuvo más iniciativas aprobadas fue Erika Rodríguez, con 233, mientras que la morenista Sharon Macotela Cisneros, sólo 48, pero también está el renglón de los legisladores que están bajo proceso judicial o denunciados penalmente, ahí la lista la encabeza Edgar Hernández Dañhu a quien se le cambió la medida cautelar de prisión por libertad condicional en el proceso que se le sigue por narcomenudeo, mientras que, Adelfa Zuñiga acumula 4 procesos en su contra desde fraude procesal hasta robo del que logró librar la cárcel.
Es decir, en un breve resumen y análisis, las cuentas muestran que tenemos un poder legislativo en el estado, caro, poco productivo y de muy poca honorabilidad, pues debemos sumar que continuamente se han destapado investigaciones donde se ven involucrados en tráfico de influencias al haber obtenido dinero de obras públicas que ellos asignan en municipios o bien, que sirvieron de enlaces para beneficiar con recursos extraordinarios de la “estafa siniestra” a los ayuntamientos, como el caso de la carpeta donde se menciona directamente a Jorge Hernández Araus.
Ahora bien, vayamos al caso de los regidores, sólo por poner un ejemplo, de las 84 asambleas municipales, la de Mineral de la Reforma, fue una de las más caras, cada regidor ganó hasta 109 mil pesos mensuales, distribuidos en dieta, asistentes y combustibles y su productividad se reduce a una iniciativa en cuatro años que presentó Hilda Miranda Miranda o Ismael Escamilla González, también sólo una en 48 meses o las 6 de Dulce María Sánchez Martínez en el mismo periodo, en el que se desembolsaron 119 millones 350 mil pesos para el sueldo de los 14 regidores y el síndico procurador.
Así los sueldos de regidores y legisladores que se estrenarán en cinco días y de los que se espera, tengan un mejor desempeño de quienes los antecedieron, si no, aquí sí hay un espacio inicial para una buena reforma, ajustar la tabulación de sueldos al rendimiento que tengan y a la realidad económica del estado, pues no se puede tener legislativo y asambleas ricas con pueblo pobre…digo.
De mi tintero… En nada cambia que Héctor Chávez y Pablo Gómez, hayan sido bajados de las diputaciones, para dar espacio a una mujer y una persona con capacidades diferentes, al final se sabe que, serán legisladores de partidos comparsas a lo que proponga y haga Morena, así que, al final sale exactamente lo mismo…Que ahora que andan inhabilitando a ex funcionarios como ocurrió con el ex auditor Armando Roldán Pimentel, por conflicto de intereses al rentar inmuebles al gobierno estatal, bien valdría la pena que la Contraloría volteé los ojos a la Fiscal Anticorrupción Alicia Medina Castelazo, que aseguran, renta dos inmuebles al gobierno estatal…