Todo comenzó a fraguarse hace dos años en un restaurante al sur de la capital, donde el diputado morenista con licencia y hoy alcalde electo de Cuautepec, Jorge Hernández Araus, propuso al alcalde Tepeji del Río Salvador Jiménez Calzadilla, acceder a “recursos públicos extraordinarios” del gobierno estatal, con la única condición que el dinero fuera transferido a empresas y personas morales específicas, no hubo ninguna objeción y el trato se cerró en la mesa.
Primero fueron 10 millones, luego 18 más hasta completar 88 millones de pesos, en entregas posteriores de 50 y 10 millones respectivamente, según la declaración del presidente municipal priista en la carpeta de investigación 12-2023-11058 de la Procuraduría de Justicia del Estado.
De acuerdo con el expediente en poder de este columnista, el presidente municipal testificó que el legislador, por cierto integrante del Grupo Universidad (GU), le aseguró que se encargaría de todo junto con la entonces secretaria de Finanzas, Jessica Blancas Hidalgo, por lo que, acordaron nombrar a representantes que se encargarían de trámites, comprobaciones y transacciones.
Del lado de Jiménez Calzadilla, operó el tesorero del ayuntamiento, Edgar Chávez Pineda, mientras que Orlando Gayosso Hernández, un contratista que por cierto, tiene vigente su registro en el Padrón de Proveedores del gobierno estatal, lo haría por el legislador y de Blancas Hidalgo, quienes hicieron todos los trámites fueron Minerva Corona Trejo ex secretaria técnica de la Secretaría de Finanzas; Karina Barrios Vázquez ex directora de contabilidad gubernamental y Verónica Vizzuet Balderas, ex coordinadora de planeación financiera, actualmente recluida en el Cereso de Pachuca por el presunto delito de peculado.
En la Carpeta de Investigación, se establece que, los primeros 10 millones de pesos, fueron depositados el 12 de mayo en la cuenta bancaria número 118699585 de BBVA a nombre del ayuntamiento de Tepeji, y es aquí cuando comienzan las presuntas irregularidades de los funcionarios municipales y servidores públicos estatales, pues le adjudican de manera directa todo el monto a Orlando Gayosso, quien a pesar de ser un particular sin personalidad jurídica alguna, le ordena al tesoro municipal Edgar Chávez, transferir el dinero y le detalla que, será su contadora Rufina Flores Revorada, quien le enviará las facturas paras las comprobaciones así como las propuestas de ejecución de obras y servicios.
El arrendamiento de maquinaria, compra de material eléctrico, fletes y acarreos, por lo que se pagaron los 10 millones, nunca se realizaron y tampoco hubo comprobación y justificación de las facturas.
Aun con todas las irregularidades que configuran hechos delictuosos, Jiménez Calzadilla se reunió nuevamente con Hernández Araus en el mismo restaurante un mes después, quien le ofrece ahora” recursos extraordinarios” por 18 millones de pesos, la condición igual que el anterior transferirlos a personas y empresas determinadas, sólo que en esta ocasión aparentemente el munícipe priista le externó su preocupación por la falta de comprobación y como respuesta recibió un «no te preocupes”.
Y así en seis días, se transfiere 18 millones de pesos a empresas que ordenaba Orlando Gayosso, por conceptos de compra de cemento; fletes; acarreos; materiales mecánicos; arrendamiento de maquinaria; lubricantes; material eléctrico; materiales de oficina; renta de equipo de transporte; materiales de construcción y reparación; material de limpieza; servicios de limpieza y separación de desechos; artículos metálicos; gastos de orden social; materiales y accesorios.
En su intento por tratar de librar el proceso y la cárcel por los delitos relacionados con la llamada “estafa Siniestra”, el alcalde de Tepeji del Río Salvador Jiménez, involucró a cuantos más pudo y así señaló a Aldo Araujo, ex director de administración de la Secretaría de Gobierno (SEGOBH) de promoverle bajo el mismo esquema 10 millones de pesos, también de “recursos extraordinarios”, por supuestas órdenes del entonces titular de la Segobh, Simón Vargas y como (sic)“eran nuestros superiores jerárquicos” y según él veía un beneficio al municipio que gobernaba, accedió.
Y de toda esta historia sólo el ex director de administración de la SEGOBH, ha sido vinculado a proceso por el juez Jesús Anim Ope, quien por cierto aseguran, fue contundente al señalar que sí alguien debería estar encarcelado y bajo proceso es el alcalde de Tepeji del Río, Salvador Jiménez y su tesorero Edgar Chávez, claro, sin menoscabar la probable responsabilidad del diputado con licencia y alcalde electo Jorge Hernández y todos los que participaron en este presunto desvió de dinero público.
De mi tintero… Por cierto, hablando de procesos e irregularidades, en los pasillos del Poder Judicial y de la Procuraduría de Justicia, dicen que, debe ser investigado el probable tráfico de influencias y conflicto de intereses de la jueza Karina Vertiz quien tiene acceso a carpetas de investigación y participa en expedientes relacionados con la “Estafa Siniestra” en los que su esposo Jesús Constantino Campos Licona, aparece como defensor jurídico, una de sus clientes es nada menos que la ex coordinadora de planeación financiera Verónica Vizzuet, quien es señalada continuamente y fue vinculada a proceso por peculado…El que estaría por alcanzar una pena de entre 8 y 9 años por el delito de peculado de más de 144 millones de pesos, es el ex director de Radio y Televisión de Hidalgo, Sergio Islas Olvera, que conmutada con los beneficios del internamiento, en 4 años y medio estaría en libertad y todo porque la acusación de la Fiscalía Anticorrupción, es endeble y mal planteada, que impediría al tribunal aplicarle la pena máxima… “están viendo y no ven” como diría el clásico, para como están las cosas de la dichosa reforma judicial y ustedes abonándole “mejor no me ayudes compadre”…