La situación está definida en Morena, sí tendrán como aliado en las próximas elecciones al Grupo Universidad sin importar que el jefe del clan Gerardo Sosa este encarcelado y enfrente un proceso por lavado de dinero y le cederán al menos siete de los espacios importantes a disputarse en el Congreso local y la mitad de los federales.
El acuerdo se habría alcanzado luego del trabajo de recomposición que hicieron tanto los delegados especiales enviados por la 4T a Hidalgo, como la nueva dirigencia estatal y quienes estuvieron al frente del partido cuando Abraham Mendoza Zenteno dejó la presidencia estatal hace más de dos años.
Si bien es cierto que al interior se registraron fuertes discusiones con los reales morenistas, es decir aquellos que nacieron cuando lo fundó Andrés Manuel López Obrador, lo cierto es que empujaron más quienes consideran necesaria la alianza con todos los grupos para tratar de recuperar los espacios perdidos en la pasada elección municipal.
Las consideraciones de que es mejor tener al Grupo Universidad que prescindir de él, también fueron respaldadas por el líder nacional de Mario Delgado un antiguo aliado de Gerardo Sosa quien se encuentra actualmente preso en el penal del Altiplano por su presunta responsabilidad en los delitos de lavado de dinero y operaciones con recursos de procedencia ilícita por 58 millones de pesos.
La dirigencia nacional y estatal de Morena consideran que los antecedentes de Sosa Castelán y su encarcelamiento no serán factor en el proceso electoral, como sí el contar con los más de 50 mil votos que el Grupo Universidad les prometió para el próximo proceso además del financiamiento que pudieran otorgar y del que ya dieron muestra en el proceso del 2018.
De tal suerte que en los próximos días estarían por definirse los nombres de los universitarios que nuevamente estarán peleando el voto contra la alianza del PRI, PAN, PES y PRD, y no se descarta que busquen reelegirse algunos de los actuales legisladores federales y locales, aunque de su trabajo hayan dejado serias dudas.
De mi tintero… Que dentro del registro de funcionarios, dirigentes y exdiputados priístas que acudieron a la sede del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, uno de los que podría considerarse con la candidatura casi amarrada es Benjamín Rico, pues no sólo tiene el apoyo de la jefatura política del estado, sino el respaldo abierto de la dirigencia nacional priísta que le reconoció su aportación y disciplina en la pasada elección municipal…A propósito de estos pre-registros dicen que de ahí podría salir la nueva mancuerna de la dirigencia estatal priísta, pues Erika Rodríguez es casi un hecho que logrará su candidatura a la diputación local y podría convertirse en una de las operadoras de la transición.