Luego de revitalizar el elenco y los distintos pasajes escénicos, el espectáculo teatral Caracol y Obsidiana se presentará el próximo domingo 19 de enero en el Centro Cultural del Ferrocarril, en punto de las 12:30 horas, como parte del programa Alas y Raíces a los Niños en Hidalgo.
Esta puesta en escena, escrita y dirigida por Fernando Axkaná, se prepara para partir hacia Chile, país en el que realizarán una serie de presentaciones, en las que el mito azteca del Quinto sol sirve de eje para varios juegos teatrales, acompañados de música en vivo.
Los festivales en los que participarán son: Entepola Pudahuel, en Santiago de Chile, que es el festival de teatro popular más importante de Sudamérica, con casi 30 años de realizarse y convoca diariamente a 3 mil espectadores al anfiteatro de Pudahuel, Entepola Salamanca en la región de Coquimbo, y que es organizado para diversas comunidades y poblaciones de Chile.
El Festival Santiago Off en Santiago de Chile, que en su tercera edición se realizará en los espacios culturales principales de la ciudad de Santiago, La Estación Mapocho, Matucana 100 y el GAM y convoca a sus actividades a miles de santiaguinos.
La obra buscan atraer al público infantil al uso común de los mitos, las leyenda y otras tradiciones orales, jugando a reconstruirlos para re-aprender sus enseñanzas.
Caracol y Obsidiana sumerge a los pequeños en una historia basada en el Quinto Sol; este divertido juego escénico re-escribe el mito del nacimiento de esta estrella y lo convierte en un verdadero mitote. Esta puesta en escena nos contará cómo el personaje principal, el Quetzal, una traviesa ave, se encuentra en problemas por la falta del Sol.
Él, junto con la Luna, inician la búsqueda de una persona que se convierta en la magna estrella, en el camino se encuentran con Caracol y Obsidiana, dos muchachos que contenderán por convertirse en el astro rey.
El espectáculo infantil conjuga la esencia ritual del teatro con la música, la danza y el trabajo lúdico del actor. Busca que el niño sea un amigo, un confidente al que el actor brinde su expresión creativa de manera desinhibida, a través de las emociones, deseos y juegos que forman parte de él y por lo tanto del niño. Con un delineamiento de la acción y el movimiento escénico, el niño participa en el mito y cuando sea necesario del mitote.